28/03/2025
La Fiscalía de Bolivia investiga tráfico de tierras contra implicados en contratos con la secta Kailasa

Fuente: telam
Luego de que se revelara que territorios indígenas estaban en trámite para ser “alquilados” a un estado ficticio, el gobierno deportó a los extranjeros involucrados en el caso
>La Fiscalía de Bolivia anunció el inicio de una investigación por el delito de tráfico de tierras y organización criminal en contra de los dirigentes indígenas implicados en los contratos de alquiler de tierras comunitarias a un estado ficticio denominado Kailasa.
En la denuncia realizada ante la Fiscalía General del Estado por la diputada Maria René Álvarez, se presentaron los “convenios bilaterales” entre Bolivia y el estado ficticio. Sin embargo, éstos no cuentan con el aval de la Asamblea Legislativa Plurinacional como corresponde para ese tipo de documentos, según explicó el fiscal departamental de Beni, Gerardo Balderas, a los medios locales.
Cinco días después de que se diera a conocer la existencia de los acuerdos de arrendamiento, la Cancillería boliviana emitió un comunicado en el que negó tener relaciones con el estado ficticio y aclaró que éste no está reconocido por la comunidad internacional. Sin embargo, representantes de Kailasa estuvieron en un acto público con el presidente Luis Arce. De ese evento queda una fotografía en la que se ve al primer mandatario recibir un libro de manos de una mujer miembro de este grupo, durante la celebración de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (Cidob) el pasado 3 de octubre. El Gobierno no ha hecho referencia a este encuentro.Según las leyes bolivianas, los pueblos indígenas tienen autonomía para gestionar su territorio pero las relaciones con otros estados y el resguardo de la soberanía nacional son competencia exclusiva del Gobierno central.
El supuesto estado se asemeja más a una secta religiosa que a un país. Según sus líderes, las tierras de “Estados Unidos de Kailasa” se perdieron bajo el océano Índico, lo que llevó a su gente a buscar nuevos territorios. Detrás de esta trama está el autoproclamado dios hindú Swami Nithyananda, quien se presenta como “fundador” del país desde 2019 y que estuvo involucrado en denuncias de violencia sexual en su país de origen.Algunos expertos consideran que los miembros de la secta tenían intereses financieros en Bolivia vinculados a los bonos de carbono. El Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social publicó un informe en el que relaciona el “alquiler” de tierras con la mercantilización del medioambiente y de los recursos naturales como “una falsa solución a los impactos generados por el cambio climático y las actividades extractivas”.
Fuente: telam
Compartir
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!