Lunes 7 de Julio de 2025

Hoy es Lunes 7 de Julio de 2025 y son las 23:26 ULTIMOS TITULOS:

07/07/2025

Demian Rugna expandió el universo de Aterrados con una novela que sangra en cada página: “El libro es más fuerte que la película”

Fuente: telam

El director de Cuando acecha la maldad habló con Infobae sobre el proceso de transformar su ópera prima en un texto perturbador que va más allá de la pantalla

>El realizador argentino habló con Infobae sobre su experiencia al convertir su película Aterrados en novela, sus sensaciones al explorar la literatura, y cómo el terror sigue enfrentando prejuicios pese a su relevancia cultural.

Publicada por la editorial Minotauro y enriquecida con ilustraciones de la directora de arte de la película Laura Aguerrebehere, Aterrados marca una nueva faceta literaria de Rugna.

La historia ya la tenía tatuada. Lo que hice fue desmenuzar detalles, agregar cosas que en el guion quedaban sugeridas. Fue una experiencia completamente distinta.”

“Me encantaría estar en sus cabezas. Vivir con ellos la historia desde cero. Es otro tipo de terror, más íntimo, más mental”, remarcó.

Para Rugna, el terror no es solo un género más: es una forma de ver el mundo. Y tanto la literatura como el cine ofrecen maneras diferentes de experimentar esa visión. El director celebra que el terror puede producir tanto repulsión como fascinación, y que más allá de los sustos, es una herramienta potente para hablar de lo humano, de lo social, y de lo espiritual.

Rugna escribió cuatro meses, luego dejó el proyecto un año, y finalmente retomó para terminarlo. “Fueron cuatro meses iniciales, después un año de pausa, y otros cuatro meses más para terminarla. Tranquilamente podrían haber sido tres años”.

Hoy puede parecer obvio que Aterrados iba a ser un éxito, pero durante años fue un proyecto trabado, sin financiamiento ni productores interesados. Rugna escribió el guión en sus primeros años como realizador, con entusiasmo pero sin certezas. Sin embargo, la falta de apoyo lo obligó a dejarlo archivado.

Durante ese tiempo, el panorama del cine argentino no era favorable para el género. Rugna incluso llegó a rodar No sabés con quién estás hablando, una parodia al cine de terror, como vía alternativa para canalizar su pasión por lo macabro desde un enfoque más viable comercialmente.

Todo cambió cuando apareció el concurso Blood Window, una iniciativa del INCAA enfocada específicamente en cine de terror, ciencia ficción y fantasía. Fue ahí donde Aterrados encontró su oportunidad.

A lo largo de su carrera, Demian Rugna insistió en desarmar una de las ideas más persistentes en el mundo del cine: la creencia de que el terror es un género menor. Durante décadas, tanto la crítica como ciertos sectores de la industria trataron al horror como un simple entretenimiento comercial, sin explorar su potencial expresivo, emocional y narrativo. Rugna considera que este menosprecio tiene raíces culturales profundas. El terror, por su vínculo con lo macabro, lo grotesco o lo simbólicamente “impuro”, fue relegado a los márgenes del prestigio artístico.

Pero para él, el verdadero terror no opera solo sobre lo visible: trabaja en lo invisible, en lo que no se dice, en lo que se insinúa. Es el terror psicológico, existencial, el que realmente perdura y afecta al espectador.

Dentro de este escenario, el cine de terror latinoamericano logró destacarse con una propuesta distinta. Rugna fue protagonista central de ese ascenso, no solo con Aterrados y Cuando acecha la maldad, sino también con su participación en proyectos colectivos como Satanic Hispanics. Estas producciones llamaron la atención del público y la crítica internacional por su enfoque particular: un terror que no copia moldes estadounidenses ni responde a fórmulas previsibles.

Lo que diferencia al horror latino, según Rugna, es su autenticidad. Las historias surgen de contextos reales, de traumas sociales, de mitologías propias y de una crudeza que no busca ser decorativa. Es un cine de terror que incomoda, que no está pulido ni estilizado para agradar. En lugar de adaptar los miedos al mercado global, propone su propia oscuridad, sin concesiones.

Así, Demian Rugna no solo representa una nueva generación de cineastas del género. También es una voz que reivindica el terror como una herramienta artística legítima, y al mismo tiempo, como una forma de mirar lo que muchas veces no se quiere ver.

Fuente: telam

Compartir

Comentarios

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!