>Un hombre fue condenado por el homicidio de su socio. Lo ató a un toro y lo quiso hacer pasar como un accidente. Sin embargo, todo salió a la luz.

La investigación posterior arrojó una verdad mucho más escalofriante. Javier Gallo, su socio y compañero de faena, fue finalmente identificado como el autor de un homicidio calificado.

Según informó el portal El Doce.tv, la investigación cambió su rumbo en 2014, cuando los fiscales empezaron a enfocarse en un posible homicidio. Según los detalles de la causa, los peritos que analizaron el cadáver de Miranda concluyeron que había recibido un golpe contundente en la cabeza, además de ser atado a un toro. Esta nueva línea de investigación apuntó a un posible enfrentamiento entre los socios, derivada de una disputa por el faltante de animales que ambos compartían en el campo. La relación laboral y personal entre Miranda y Gallo no era tan tranquila como parecía a simple vista.

El fiscal Julio Rivero, quien había solicitado una condena de 18 años de prisión, argumentó que el caso no podía ser considerado como un homicidio con alevosía, por lo que pidió una pena menor. Por otro lado, el abogado querellante, Osvaldo Narcisi, solicitó la pena máxima de perpetua, algo que el tribunal finalmente resolvió. Según las pruebas, Gallo había matado a Miranda de forma premeditada, utilizando el toro como un medio para simular un accidente y despistar a las autoridades.