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25/04/2025

La vida al límite de los bandidos de la Villa 1-11-14 que le rompieron tres vértebras a una víctima

Fuente: telam

Raúl Donayre y Percy Caledonio fueron capturados por la Policía de la Ciudad tras un violento asalto cometido en febrero último

>El 17 de febrero pasado a las 6, un hombre de 32 años, oriundo de Perú, fue asaltado por dos hampones a punta de pistola en un pasaje cercano a la capilla San Antonio la Villa 1-11-14. Le robaron su celular, un viejo Samsung, junto con su billetera. Podría haber terminado allí. Sin embargo, el hombre sufrió una bestial golpiza. Lo atacaron por la espalda. Luego, a trompadas en el rostro. Los ladrones se detuvieron solo cuando vieron pasar a dos policías. Así, corrieron rumbo al Bajo Flores.

Entonces, la Policía de la Ciudad comenzó a rastrear a los delincuentes, cámara por cámara. Un domo los tomó en su fuga; un par de zapatillas parecía la pista principal.

Las zapatillas que uno de ellos habría utilizado en el ataque del 17 de febrero fueron halladas en uno de los allanamientos para capturarlos.

Mientras tanto, sus fichas en la Cámara Criminal y Correccional hablan de una vida delictiva al límite.

De acuerdo a fuentes del caso, Donayre fue acusado en 2020, cuando aún era menor de edad, de asaltar a tres víctimas -una de ellas, un taxista- en dos expedientes distintos junto a otros jóvenes ladrones del Bajo Flores. La calificación siempre fue la misma: robo en poblado y en banda. Por lo menos, según lo relevado por Infobae, no habría recibido una condena hasta el momento.

Este año, también, fue denunciado por violencia de género, con una presentación en su contra en la OVD de la Corte Suprema. Los delitos en la lista son idénticos a los de su cómplice: robo en poblado y en banda, encubrimiento.

Percy y Raúl son parte de un cambio de época que comenzó en la última década en la Villa 1-11-14: el poder casi inamovible que ostentó la banda de “Marcos” Estrada González, el líder dealer de la zona, dio lugar a jóvenes bandas de rateros que comenzaron a delinquir en el Bajo Flores con un alto nivel de violencia.

Sin embargo, cometieron un error grosero: en el auto estaba el celular de la víctima, que jamás descartaron. Ese teléfono, que fue denunciado, emitió una señal que llegó hasta el Barrio Illia del Bajo Flores. En abril de ese mismo año, el fiscal Claudio Fornaro logró capturar a cuatro de cinco miembros de la banda. Todos ellos tenían entre 17 y 21 años.

El 24 de diciembre de 2016, B.G, el menor de edad acusado de ser el tirador, nacido en Perú, eludió a la Justicia. Tenía 15 años al momento del crimen: su familia lo ayudó a fugarse de vuelta a su país. Integraba una pandilla de motochorros, “La Banda de la Salita”, se hacían llamar.

Fuente: telam

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