12/12/2025
Ganó un concurso de alojamientos exóticos y fabricó una casa de cuentos de hadas en Bariloche: “Está inspirada en Hansel y Gretel”
Fuente: telam
Su creadora, la arquitecta María del Valle Cantaluppi Yrigoyen, ganó USD 100 mil para construir una cabaña temática frente al Lago Nahuel Huapi. Realizada íntegramente con troncos de cipreses, resulta encantadora no solo para los turistas sino también para los curiosos que se acercan a fotografiarla
>Viajar ya no se trata solo de elegir un destino: se trata de sumergirse en mundos posibles, atravesar historias y habitar espacios capaces de transformar una estadía en un recuerdo imborrable. En un escenario donde el turismo y la hotelería se reinventan sin pausa, cada proyecto busca deslumbrar con propuestas que combinan diseño, imaginación y una cuota necesaria de excentricidad.
Y en ese mapa global de maravillas, Argentina comienza a escribir sus propias historias extraordinarias. Una de las más recientes floreció en los bosques patagónicos. Se trata de La casa de chocolate de Hansel y Gretel, una cabaña temática construida sobre el antiguo garaje de una casona de Bariloche, que hoy se presenta como el nuevo imán turístico de la ciudad y uno de los alojamientos más peculiares del país.
Detrás de esta experiencia inmersiva está la arquitecta María del Valle Cantaluppi Yrigoyen, quien en 2022 ganó USD 100.000 en un concurso llamado OMG Fund, de la plataforma Airbnb, que buscaba fomentar la construcción de cien diseños únicos a nivel mundial, los cuales combinaran simbolismos culturales y naturales con una innovadora estructura.
La chispa tardó segundos en encenderse. Tenía que presentar una propuesta de hospedaje que fuera una experiencia total, un destino en sí mismo. Para la arquitecta, que había recorrido Bariloche desde la adolescencia, la ecuación apareció sola: bosque + chocolate + cuento. El embrujo estaba servido. Hansel y Gretel asomaban desde las sombras del bosque patagónico.
Pero había un problema: la escritura no estaba lista. El escribano, incluso, le recomendó desistir del concurso: “Me dijo: ‘No, no te metas. Eso puede ser una estafa’”. Sin embargo, el concurso avanzaba con plazos estrictos y no había tiempo para detenerse. “Presenté una declaración jurada afirmando la titularidad del terreno, como se acostumbra en Estados Unidos, y sorpresivamente fue aceptada”, se entusiasmó.
La obra comenzó sobre el antiguo garaje del fondo, rodeado de arrayanes centenarios y cipreses que parecían custodiar la historia. El proceso fue artesanal, lento y minucioso. Nada se compró al por mayor; cada elemento debía transmitir el espíritu del cuento. “No es que uno va, compra los muebles y los pone. Cada objeto hubo que buscarlo, confeccionarlo, probarlo”, describió la arquitecta.
El resultado fue una cabaña de dos pisos donde la madera domina todo, las ventanas de PVC con doble vidrio garantizan abrigo, y un deck en “L” abre la vista completa al Nahuel Huapi. Los interiores equilibran magia con funcionalidad: calderos antiguos en la cocina, tablillas con recetas secretas, disfraces de brujas para el playroom, y chocolates escondidos por toda la casa como tesoros para los más chicos.
Por dentro, la construcción dibuja un recorrido casi teatral: se ingresa por el salón de usos múltiples —herencia del garaje original— y desde allí se asciende a diferentes niveles. Un playroom equipado con camas móviles y baúles repletos de disfraces invita a jugar y explorar. Más arriba, una suite luminosa ofrece espacio para una pareja y un niño. En la planta baja, un living comedor integrado con la cocina, y un dormitorio adicional completan la escenografía.
Tras casi tres años de obra, La casa de chocolate de Hansel y Gretel ya está disponible para alquilar a través de la plataforma Airbnb. El contrato de exclusividad se extenderá durante un año, y el precio ronda los USD 200 por noche, con descuentos semanales y mensuales.
“Ayudó mucho que el lugar ya tuviera magia. Yo solo subrayé la fantasía”, resumió la arquitecta. Lo que sigue será todavía más interesante: ver cómo los huéspedes se apropian de la historia y dejan sus propias huellas en el cuento.
Fuente: telam
Compartir
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!



