Esto despertó al conjunto platense, que empezó a asfixiar a su contrincante, no lo dejó jugar cómodo y avisó con un disparo de Diego Mastrángelo desde un tiro libre frontal, que se fue por encima del travesaño antes de la media hora de juego.

El inicio del complemento repitió la falta de acciones de riesgo en las áreas hasta que el cuadro de la Ribera salió del letargo a los 56’ con un punzante centro de Tomás Aranda y una definición a quemarropa de Leonel Flores, que fue rechazada a puro reflejo por Kadijevic. La pelota quedó viva en el rectángulo mayor y, luego de una sucesión de toques, Valentino Simoni resolvió con un tiro al ángulo para equilibrar el trámite en el Sur de la provincia de Buenos Aires.

El alargue se tornó tedioso de observar para el espectador. El cansancio se impuso en los dos equipos y le quito frescura a un encuentro que volvió a desnivelar su resultado con otro buen desborde sobre la banda. Lautaro Bianco y Leonel Flores, dos de los cambios dispuestos por Herrón, le dieron la razón al entrenador con un centro a baja altura de Bianco empujado a la red por Flores en el área chica a los 101 minutos. El guardameta Julián Kadijevic llegó a tocar el balón, pero cuando intentó atenazarlo ya había cruzado la línea de gol.

Sobre el final, Boca Juniors se pudo llevar la gloria evitando los penales con un testazo cruzado de Gonzalo Gelini despejado por Kadijevic y, en el rebote, Facundo Herrera falló su tiro desde una posición con escaso ángulo. El pitazo de Matías Ansede condujo todo a los penales. En dicha instancia, el Xeneize volvió a sacar chapa, fue efectivo y se quedó con el triunfo por 4 a 1.