>Alguien que conoce muy bien a Franco Colapinto es Lucas Benamo, su amigo y coach en sus inicios. De hecho, el ex piloto bahiense estuvo en la primera prueba del corredor de Alpine sobre un monoposto, en 2015 en Uruguay sobre un Fórmula 4 Sudamericana. Este fin de semana se reencontró con su pupilo y vivió desde adentro la actividad en el Gran Premio de Austria de Fórmula 1.

“La F1 es una categoría muy difícil de disfrutar para los pilotos. Salvo los consagrados. En el caso de Franco, la presión es tanta como la que tienen casi todos los pilotos que están en la grilla. Los pilotos tienen que rendir una prueba cada vez que están en la pista”, destacó.

También valoró que “Franco viene dando pasos hacia adelante. Esta carrera fue importante porque el domingo fue súper competitivo, él con una goma dura, con un auto bastante indócil, lastimado por el toque de Tsunoda (Yuki), en el que se le rompió el piso y también el alerón de adelante. Fue el más rápido de la pista durante dos vueltas y en un stint (tramo de carrera) muy largo, y fue mucho más rápido que Gasly”.

Pese al mal presente, Lucas tiene fe de cara a lo que viene: “Lamentablemente, hoy el nivel del Alpine no está siendo como el año pasado, que sí tuvo el Williams, con un buen motor, algo que en carrera es muy importante para atacar o defenderse. Pero soy optimista que en Silverstone, de local, puedan tener una buena actuación, ya que los autos doblan bastante bien, y es un circuito de mucha velocidad media, de mucha curva”.