26/04/2025
La homilía del cardenal italiano Giovanni Battista Re: “Francisco no cesó de alzar su voz implorando la paz”

Fuente: telam
El decano del colegio cardenalicio, encargado de oficiar las exequias ante 200.00 personas y más de 140 delegaciones internacionales, citó frases del papa argentino y lo recordó con mucho afecto
>El “Frente al estallido de tantas guerras en estos años, con horrores inhumanos e innumerables muertos y destrucciones”, el papa Francisco no ha cesado de alzar su voz implorando la paz e invitando a la sensatez, a la negociación honesta para encontrar posibles soluciones >El cardenal, encargado de oficiar las exequias ante 200.00 personas y más de 140 delegaciones internacionales, citó otra de las frases que Francisco solía pronunciar: “Porque la guerra es sólo muerte de personas, destrucción de casas, hospitales y escuelas. La guerra siempre deja al mundo peor que antes, para todos es siempre una derrota dolorosa y trágica”.
“Estableció contacto directo con la gente, deseoso de estar ahí para todos, con una marcada atención a quienes tenían dificultades, dedicándose a pensar en todo, hasta en los últimos habitantes de la Tierra y en los marginados. Fue un papa entre el pueblo, con un corazón abierto a todos”, añadió Re.
El cardenal recordó también una de las más famosas frases de su pontificado: “Construir puentes y no muros”, una frase pronunciada en presencia del presidente de EEUU, Donald Trump, y otros numerosos líderes mundiales.En el comienzo de su homilía Re destacó que “su última imagen, que quedará en nuestros ojos y en nuestros corazones”, es la del pasado Domingo de Resurrección cuando “a pesar de graves problemas de salud, quiso impartirnos su bendición desde el balcón de la basílica de San Pedro y después bajó a esta plaza para saludar desde el papamóvil”.“A pesar de su fragilidad y sufrimiento final, el papa Francisco eligió seguir este camino de donación hasta el último día de su vida terrena”, subrayó.“Su carisma de acogida y de escucha, unido a un modo de actuar propio de la sensibilidad actual, ha tocado los corazones, buscando despertar energías morales y espirituales”, añadió.
Subrayó también su idea de que “la Iglesia es un hogar para todos; una casa con puertas que siempre están abiertas”, así como su atención a favor de los refugiados, desplazados y pobres.Y al respecto, citó que fue significativo que su primer viaje fuera a Lampedusa, “isla que es símbolo de la tragedia de la emigración con miles de personas ahogándose en el mar” o que viajase también a la isla griega de Lesbos y la celebración de una misa en la frontera entre México y Estados Unidos, con motivo de su viaje al primero de estos países.Y concluyó recordando que Francisco solía terminar sus discursos y encuentros diciendo: “No se olviden de rezar por mí”.
(Con información de EFE)
Fuente: telam
Compartir
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!