Viernes 25 de Abril de 2025

Hoy es Viernes 25 de Abril de 2025 y son las 11:08 ULTIMOS TITULOS:

25/04/2025

Miguel Benasayag: “Pasamos del futuro-promesa al futuro-amenaza”

Fuente: telam

Fue guerrillero, estuvo preso, se mudó a Francia y ahora investiga sobre el cerebro y las nuevas formas de conocimiento. “El poder no es el lugar del cambio, eso ya fue”, dice. Se presenta hoy viernes en la Feria del Libro

>“Yo era medio hippie antes de ser guerrillero”, dice así, como al pasar, Miguel Benasayag. Lo dice en una sala que se viene abajo de libros, en la nueva sede de la editorial Prometeo, que también tiene abajo un cafecito. Y así fue: este hombre que ahora saca libro tras libros, que piensa en el funcionamiento del cerebro y en la inteligencia artificial, antes fue un estudiante de Medicina y, después, parte del Ejército Revolucionario del Pueblo. Lo metieron preso, lo torturaron, estuvo cuatro años en la cárcel, en 1978, gracias a que también tenía la nacionalidad francesa, lo dejaron salir y viajar a ese país europeo. Ahí vive.

Pero ahora ni está hablando de eso, no está hablando de ese pasado sino, justamente, de este presente. Iba a poner “está hablando del futuro” pero, justamente, pronto dirá que hay que sacarse de encima la idea de futuro, que vivir en lo que no está es “colonizante”, que hay que habitar el presente. Lo dice como ideología pero también como investigación: se ha convertido en un epistemólogo, en un hombre que habla del funcionamiento del cerebro, de en qué somos igual o distintos a las máquinas. Todo sin borrar ese que fue: uno de los ejemplos puede empezar con: “Cuando yo estaba en la cárcel...”

Pero, en fin, esta es una charla de Benasayag con varios periodistas. Y puede sorprenderse quien lo escuche decir: “El poder no es el lugar del cambio, eso ya fue. Fue un siglo de revoluciones y vimos que el poder no es el lugar del cambio. El poder es desear. El horror en realidad es desear ser un dictador. Pero si millones de situaciones particulares pueden cambiar la relación de fuerzas... ahí no se puede saber”.

La charla empezó por otro lado, por otro libro. Uno que se llama La singularidad de lo humano y donde trata de encontrar qué nos diferencia de las máquinas. ¿Qué nos diferencia? Cuestiones técnicas, responde. Pero también que los “sistemas vivos” somos los únicos capaces de producir “orden a partir del desorden”. Improvisar, diría uno, desde el llano. Pensar, como se usa ahora, “fuera de la caja”.

-¿Y esto qué diferencia produce?

-Estamos inundados de información que provoca inhibición. Hay un ejemplo histórico que es el debate entre George Orwell y Aldous Huxley. Resulta que Orwell decía: “dentro de unos años van a prohibir los libros”. Y Huxley, que la gente no iba a leer libros, que los libros les iban a importar un pito. Orwell dice: “Dentro de unos años la verdad será escondida”. Y Huxley le contesta: “Dentro de unos años va a haber tanta información que la verdad va a estar diluida”. Y en realidad la cuestión es esa: nos damos cuenta, neurofisiológicamente y epistemológicamente, de que el exceso de información no solamente no provoca el acto, sino que evita el acto, inhibe el acto.

-Y un poco la posverdad tiene que ver con eso. Para lo que vos comprendés corporalmente no hay posverdad: si te estás quemando, te estás quemando. Pero en un mundo donde todo es información eso no pasa y una información vale tanto como la otra.

-¿Qué impacto tiene en nosotros todo este boom de no desconectar nunca?

-¿Un ejemplo?

-Hicimos un trabajo con choferes de taxi que empezaban a usar el GPS. Al cabo de tres años, todos los que habían comenzado a manejar con GPS tenían los núcleos subcorticales del tronco cerebral, que se ocupan de cartografiar el tiempo y el espacio, atrofiados. Todo eso es la delegación de función. Estamos en un cambio evolutivo donde el cerebro no se va a ocupar más de las cosas que se ocupaba hasta ahora.

-Por un lado, hay una debilitación de la estructura cerebral y, por otro, cada vez hay menos experiencia directa. Entonces el cerebro tiene dos fenómenos de debilitación. Eso es un problema para mí, para algunos genios de la Silicon Valley no es un problema. Es un momento histórico donde se cree que las máquinas se van a ocupar de lo que hasta ahora se ocupaba, mal, el humano.

-¿Y se van a ocupar bien?

-Es que las máquinas pueden tener un nivel de producción y de eficacia muy alto.

-Es la cuestión de funcionar o existir. Hay una colonización del funcionamiento sobre la complejidad del existir. Entonces, en un mundo donde de lo que se trata es de producir, de eficacia, la máquina es perfecta. El problema es la asimilación de nosotros como seres vivos, de la cultura, a la producción.

-Yo creo que nosotros podemos servirnos de las máquinas, en una hibridación no colonizante, no aplastante como la de ahora. Yo creo que nosotros podemos gestionar una democracia y una justicia social. No es cierto que hace falta la hiperracionalidad de la máquina para comer, como no es cierto que hacen falta transgénicos para alimentar a la gente. Eso es ideología. Una ideología que dice, como diría Margaret Thatcher, que no hay alternativa.

-Estamos en una época donde pasamos del futuro-promesa que ordenaba el mundo al futuro-amenaza. Y yo creo que hay que emanciparse del futuro. No es una consigna, es una realidad. Es la descolonización. Descolonizarse de ese tiempo lineal donde tenemos la cabeza absolutamente llena de minutos. El reloj fue el gran colonizador del mundo, ¿verdad? En realidad, no sé, qué va a pasar, pero lo que sé es que cuando pienso en qué va a pasar, estoy perdiendo el tiempo.

-Si no logramos amar esta época, si nosotros no logramos encontrar prácticas alegres, prácticas potentes, prácticas solidarias, no vamos a poder cambiar nada.

-El poder no es el lugar del cambio. Eso ya fue. Fue un siglo de revoluciones y vimos que el poder no es el lugar del cambio.

♦ Benasayag presenta los libros Elogio del conflicto y Clínica del malestar. este viernes 25 de abril a las 19.

♦ Lugar: sala Julio Cortázar. Pabellón Amarillo

Fuente: telam

Compartir

Comentarios

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!