Jueves 25 de Septiembre de 2025

Hoy es Jueves 25 de Septiembre de 2025 y son las 08:30 ULTIMOS TITULOS:

25/09/2025

Un matrimonio de espías y una misión imposible: así intentaron cazar a un topo en la CIA

Fuente: telam

Andrew y Jihi Bustamante relatan cómo crearon una célula de espionaje dentro de la agencia, pero su falta de transparencia también generó dudas

>La publicación de Shadow Cell, obra de Andrew y Jihi Bustamante, ha generado controversia por su aproximación a uno de los episodios más enigmáticos de la inteligencia estadounidense en el siglo XXI: la supuesta infiltración de un topo en una de las divisiones más sensibles de la CIA.

Desde el inicio, los autores advierten que, por exigencia de la CIA, han modificado los nombres reales de sus colegas y fuentes, así como detalles superficiales que podrían permitir su identificación, incluyendo descripciones personales y la cronología exacta de los hechos.

El desarrollo de la trama se apoya en la experiencia previa de los Bustamante en operaciones contra al Qaeda, lo que les permitió diseñar una estrategia basada en la creación de una célula terrorista ficticia dentro de la propia CIA. El objetivo era replicar la estructura de células aisladas y autosuficientes para identificar al infiltrado.

El contexto geopolítico que rodea la historia se presenta como un escenario de creciente hostilidad: Estados Unidos pierde influencia global mientras Falcon refuerza su poderío militar, desarrolla armamento avanzado, intensifica sus relaciones con otros adversarios estadounidenses, incrementa los ciberataques y se prepara para invadir países vecinos. Esta descripción sugiere paralelismos con potencias como Rusia o China, aunque los autores nunca lo confirman, lo que añade ambigüedad al relato.

La obra se inscribe en la tradición de memorias de operaciones encubiertas, como Argo: How the CIA and Hollywood Pulled Off the Most Audacious Rescue in History (2012) y Black Ops: The Life of a CIA Shadow Warrior (2022). En Argo, se narra cómo un agente de la CIA fingió ser productor de una película de ciencia ficción para rescatar diplomáticos estadounidenses en Irán, mientras que Black Ops relata la reapertura de una estación de la CIA en una ciudad africana bajo el nombre ficticio de “Shangri La”.

La relación de los Bustamante con la CIA se describe como la de un “matrimonio en tándem”, formado por espías que se conocieron como aprendices en Langley y contrajeron matrimonio mientras perseguían terroristas en distintos continentes. Su designación para la misión en Falcon se justifica por su falta de experiencia previa en ese país, lo que los convertía en candidatos discretos y prescindibles, capaces de reforzar la posición de la agencia y, al mismo tiempo, servir de señuelo para el topo.

No obstante, el texto cuestiona la lógica de que la CIA desconociera la experiencia de la pareja en operaciones contra el terrorismo, sugiriendo que, o bien actuaron de forma encubierta sin informar a sus superiores, o el relato incurre en contradicciones.

El libro se promociona como “el relato vertiginoso y desconocido de una de las mayores crisis de inteligencia de la historia”, aunque el análisis subraya la contradicción inherente a calificar de histórica una historia que, por definición, permanece oculta. La falta de datos verificables y la utilización de nombres en clave refuerzan la percepción de que el relato puede ser tanto una ficción vendida como realidad, como una verdad que la CIA prefiere negar por las implicaciones de sus acciones.

Al examinar el contenido, se observa que la narrativa recurre a descripciones de entrenamientos en Langley, donde los agentes enfrentan simulacros de situaciones extremas, y a la reiteración de la amenaza del topo, quien habría penetrado las divisiones más sensibles de la agencia.

Fuente: telam

Compartir

Comentarios

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!