Martes 18 de Marzo de 2025

Hoy es Martes 18 de Marzo de 2025 y son las 13:19 ULTIMOS TITULOS:

18/03/2025

Viaje al templo egipcio dedicado a Ramsés II: estatuas de piedra gigantes y el efecto del sol que se da dos veces por año

Fuente: telam

El argentino Andrés Salvatori narra en estas nota la visita a Abú Simbel. La estatua del dios de la oscuridad que nunca se ilumina. Y cómo fue el traslado de este espacio para construir una represa

>Egipto, la tierra de los faraones, desborda de sitios de interés. Hasta aquí llegó Andrés Salvatori. Las grandes pirámides y todos los atractivos de El Cairo, Alejandría, el Mar Rojo y sus playas, el Nilo y sus templos como Kom Ombo, Edna, Edfú, Luxor y sus misteriosas tumbas. Dejamos todo esto a un lado y nos desplazamos aún más al sur, alejándonos del Mediterráneo, para visitar Abú Simbel y toda su magia.

El Templo principal de Abú Simbel está dedicado a Ramsés II, un faraón de la Dinastía XIX de Egipto, aproximadamente unos mil doscientos años antes de Cristo. Su fachada tiene 38 metros de alto por 33 de ancho y en ella se pueden ver a cuatro grandes estatuas que representan al propio Ramsés sentado en un trono, cada una de unos veinte metros de altura, rodeadas de otras figuras menores que no les llegan ni a las rodillas. Por dentro, una vez que ingresamos, avanzamos por un corredor, del cual nacen cámaras laterales a ambos lados, con estatuas, bajo relieves, pinturas, hasta llegar a la parte principal, el Santuario, que se ubica al final del pasillo, y en el cual se encuentran cuatro grandes esculturas representando a los dioses Amón, Ra, Ptah y al propio faraón, todos sentados. Lo que tiene de particular es que dos veces al año, el 21 de octubre y el 21 de febrero, los rayos del sol bañan al santuario, iluminando a tres de las cuatro figuras: a Amón, a Ra, al propio Ramsés, pero no lo hacen con la cuarta. Ptah, dios relacionado justamente con la oscuridad y el inframundo, permanece en las sombras.

Algo muy interesante con respecto al lugar aconteció en la década del sesenta del siglo pasado. En esos años se estaba por construir la represa de Aswán, que hoy en día está al lado de la ciudad, razón por la cual, al elevarse el nivel del agua antes de la represa, implicaba que muchos edificios históricos iban a quedar sumergidos, entre ellos, los más notables, los templos de Abú Simbel.

Fuente: telam

Compartir

Comentarios

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!