Viernes 18 de Octubre de 2024

Hoy es Viernes 18 de Octubre de 2024 y son las 13:27 ULTIMOS TITULOS:

18/10/2024

Kursk y la caída de la propaganda de Vladimir Putin

Fuente: telam

Cuando se producen crisis como la desatada tras la incursión ucraniana en esa región, la estructura del Kremlin se tambalea

>A principios de agosto, las fuerzas ucranianas cruzaron la frontera rusa y tomaron el control de unos 980 kilómetros cuadrados en la región de Kursk, un golpe que sorprendió al Kremlin. Mientras los medios estatales rusos afirmaban que todo estaba bajo control y que el presidente Vladimir Putin gestionaba eficazmente la respuesta militar, la realidad en el terreno era muy distinta. “Los militares afirman que Kiev no ha logrado su objetivo de asegurarse un punto de apoyo en la región rusa”, informó RT al día siguiente del inicio de la invasión.

Este tipo de declaraciones negativas, que rara vez se dirigían antes a Putin, comenzaron a proliferar tras la ofensiva. Según un análisis de Filter Labs, empresa de inteligencia artificial que estudia redes sociales y datos económicos rusos, el sentimiento en línea hacia el presidente cayó considerablemente después de Kursk y se mantuvo en niveles bajos durante todo agosto.

El desplome de la confianza pública en Putin no había sido tan marcado desde el fallido golpe de Yevgeny Prigozhin en 2023, recordó Foreign Affairs. En las encuestas, la popularidad del presidente cayó del 60% al 50% en solo tres semanas.

Según los expertos, la maquinaria propagandística de Putin ha sabido gestionar con éxito el apoyo popular en anteriores conflictos. Sin embargo, cuando se producen crisis como la incursión ucraniana en Kursk, la estructura de propaganda del Kremlin se tambalea.

A pesar de los intentos de silenciar el descontento, las quejas de los ciudadanos rusos sobre la respuesta militar fueron demasiado evidentes. “Los residentes de Kursk creen que el gobierno los ha abandonado”, fue el titular en un medio local.

El citado Foreign Affairs destacó que esta crisis de confianza, aunque no necesariamente indica el surgimiento de un movimiento anti-Kremlin, revela las vulnerabilidades del sistema autoritario de Putin. En tiempos de dificultad, el régimen no es capaz de controlar completamente la narrativa ni el comportamiento de la población.

Además, los problemas económicos han afectado especialmente a las familias de los soldados. A pesar de las grandes bonificaciones ofrecidas por el Kremlin a los soldados que se alistan, muchas familias temen que sus seres queridos no reciban compensaciones si mueren en combate.

La incursión en Kursk ha evidenciado cómo los shocks inesperados afectan el control del Kremlin. Aunque Moscú ha intentado minimizar el impacto de la operación ucraniana, las críticas públicas y la falta de una respuesta militar contundente han dejado al régimen expuesto. Mientras los medios estatales intentaban reordenar la narrativa, quedó claro que el Kremlin no siempre tiene el control absoluto.

Este episodio refleja una tendencia preocupante para el régimen. Cada vez que se produce un golpe inesperado, como el motín de Prigozhin o la invasión de Kursk, la maquinaria propagandística del Kremlin se paraliza. La falta de directrices claras desde el liderazgo deja a los medios estatales y a los canales de Telegram sin una narrativa unificada, lo que expone la fragilidad del sistema.

Para los aliados de Ucrania, esta debilidad en el sistema de información de Rusia ofrece una oportunidad estratégica. Cambiar el cálculo de Putin sobre los riesgos internos que enfrenta al continuar la guerra es crucial.

Las iniciativas de comunicación dirigidas a las familias de soldados rusos y a la sociedad en general podrían socavar la moral y aumentar la presión sobre el régimen.

Los aliados de Ucrania no pueden permitirse desperdiciar futuras oportunidades para explotar estas vulnerabilidades, especialmente cuando la maquinaria de propaganda rusa se ve atrapada en la confusión, concluyó Foreign Affairs.

Fuente: telam

Compartir

Comentarios

Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!